EXCURSIÓN A SIERRA NEVADA

EXCURSIÓN A SIERRA NEVADA

         El día 3 de marzo de 2015, fuimos de excursión a Sierra Nevada con los cursos de 3º y 4º.

         Primero, cogimos el autobús en mi colegio Ramón y Cajal a las 8:00 de la mañana. Mientras iba en el autobús, observé un paisaje de llanura con árboles y campos y después un paisaje de montaña.

         Cuando llegamos a Sierra Nevada, nos bajamos en Pradollano a las 9:30, allí había muchas casas y edificios. Después, nos dieron unas pulseras para poder montar en el telecabina y a continuación, subimos al telecabina mi compañera y seis niños más y mientras ascendíamos, se veían personas esquiando por la montaña.

         Cuando el telecabina nos dejó, fuimos a la tienda de alquiler donde nos dieron las botas, los esquís y los bastones. Luego, nos entregaron un peto y un casco a cada uno de los niños/as y subimos por una rampa mecánica, dejamos las mochilas y nos separaron por grupos. A mí me tocó con el profesor Alex. Alex es alto, grueso, con el pelo largo y moreno, llevaba barba y gafas de esquiar.

     Al principio, nos enseñó a ponernos los esquís y después a hacer la cuña, que sirve para frenar. Cuando aprendimos, nos tiramos por una cuesta pequeña 2 ó 3 veces, posteriormente pasamos por tres iglús y nos tiramos por una cuesta muy larga y volvimos a subir por otra rampa mecánica.

     Sobre las 14:15, nos dieron una bolsa con un bocadillo y agua. Cuando terminamos de comer, el profesor de educación física, nos dijo que, los que quisieran se fueran a esquiar y los demás a jugar con la nieve.

     A las 15:30, recogimos todo y dejamos los petos y los cascos. Seguidamente,  las botas, los esquís y los bastones, después bajamos otra vez por los telecabinas, subimos al autobús y  a las 18:00 llegamos al colegio, donde me recogió mi padre.

     He pasado un día maravilloso y creo que ha sido la mejor excursión que he tenido hasta ahora.

Irene Roca Iáñez

                            SIERRA NEVADA   

   El martes día 3 de marzo, fuimos de excursión a Sierra Nevada.

   Muy temprano llegamos al colegio. Había muchos padres acompañando a sus hijos. Llegó el momento de irnos, me despedí de mis padres y subí al autobus.

   Antes de salir mi seño pasó lista. El viaje se me hizo corto porque fui hablando con mis compañeros.

   Por fin llegamos a la Sierra, nos esperaban dos monitores ya preparados. Nos pusieron una pulsera que al principio no sabía para que servía.

   Subimos hasta la zona donde nos recogió el telecabina, al que había que subirse con rapidez o si no  tenias  que esperar al siguiente. En cada telecabina cabían ocho personas y cada vez que pasábamos por una especie de torre hacía un ruido raro.

   Al llegar subimos por unas escaleras mecánicas hasta la zona de alquiler. Allí tuvimos que hacer bastante cola, para recoger los esquís, los bastones y las botas porque nos tenían que ir llamando uno por uno.

   Una vez que ya teníamos casi todo fuimos a por el casco.

  Cuando salimos vi el paisaje de montaña, a lo lejos se divisaba todas las montañas cubiertas de nieve y como por ellas se

deslizaban los esquiadores. A la derecha vi una cinta mecánica que servía para subir al punto de partida.

  Mientras observaba, nos íbamos subiendo en la cinta que nos llevó a la zona de esquiar. Allí, la liamos, porque cada vez que alguien se caía la cinta se paraba.

   Finalmente llegamos arriba, nos esperaban cuatro monitores que nos dividieron en grupos. Mi grupo estaba con el profe Gabi, que nos llevó a una pista y allí empezamos.

   Al principio me caí unas cuatro veces, pero luego lo conseguí y, así estuvimos hasta la hora de desayunar. Luego, estuvimos con otra monitora que nos enseñó a frenar en cuña.

   Llegó la hora de comer el bocata.  Después un rato de juego. Sobre las 16:00 nos fuimos a dejar todo. Otra vez había que hacer cola. Nos pusimos nuestro calzado y subimos al telecabina para bajar. De ahí, al autobús que nos llevó al cole donde nos esperaban nuestros padres.

  Ha sido una experiencia inolvidable.

  ¡Ojalá la pudiera repetir!

         Roberto Romero Arias 

 

VIAJE A LA SIERRA

    Hoy, tres de marzo de 2015, he ido de excursión a Sierra Nevada.    A las ocho en punto de la mañana, nos hemos subido en el autobús para ir a la sierra.
   Desde el autobús he visto un precioso perro que parecía un zorro negro.
   Al llegar nos han puesto una pulsera para poder montarnos en el telecabina. El viaje en el telecabina ha sido muy emocionante.

   Una vez arriba hemos ido a una tienda a por los esquís, las botas y los bastones. Había una cola tremenda para entrar. Luego tuvimos que cargar con los esquís y los bastones, yo creo que los esquis pesaban dos kilos, hasta la zona de esquiar.
   Había una cinta mecánica para subir las cuestas, yo me he caído en ella y no me ha gustado.
   ¡Lo mejor de todo es que he aprendido a esquiar! Aunque me haya caído muchas veces me he levantado.

   A las dos en punto nos han dado un bocadillo y una botella de agua.
   Sobre las seis hemos llegado al colegio.
   Yo les doy las gracias a mi mamá y a mi papá por haberse esforzado un montón para comprarme el material necesario para ir a este viaje tan bonito y tan divertido.

MARÍA PÉREZ RODRÍGUEZ

VIAJE A SIERRA NEVADA

       Nos subimos al autobús a las 8:00 de la mañana para estar en Sierra Nevada a las 9:00.

    Tardamos mucho en ponernos todos las botas, que por cierto pesaban un montón, y los esquís, que no pesaban tanto pero costaba llevarlos. Luego cuando todos teníamos los esquís y las botas fuimos a que nos dieran un casco y un peto.

    Después, fuimos hasta la manta, que es una máquina en la que te subes y te lleva hasta arriba con los esquís.

   A continuación, soltamos las mochilas y nos dividieron en grupos. Nuestro profesor se llamaba Jorge y nos enseñó a esquiar con bastones y sin bastones.

    Más tarde, almorzamos todos juntos y el profesor Jaime nos dijo que podíamos jugar o seguir con los esquís y yo jugué. 

   ¡Ah, se me olvidaba! Pudimos subir en el telecabina, que estaba muy chulo por cierto.

   Por último, dejamos las botas, los esquís y los bastones y nos subimos en el telecabina para ir al autobús, y aquí se acabó la magnífica excursión en Sierra Nevada que para mí ha sido la mejor excursión hasta ahora. ¡ Qué fantástico día!

Daniel Sánchez Samos

EXCURSIÓN A SIERRA NEVADA

     Ayer, día 3 de marzo, a las 8 tuve que ir al colegio porque me iba de excursión a Sierra Nevada.

     Durante el trayecto vi un montón de paisajes preciosos, pero él que más me encantó fue el paisaje de Sierra Nevada. Eran unas montañas cubiertas de una nieve blanquísima con un Sol de frente, que daba un calor terrible, sin embargo era incapaz de derretir la nieve. Me hizo sentir calor y a la vez frío porque daba mucho el Sol y había mucha nieve, me hacía estar confuso.

    Allí nos subimos en el telecabina, fue lo que más me gustó del viaje. ¡Ver como la gente se veía tan pequeña en ese lugar tan nevado, me maravilló!

     Llegamos a una tienda para que nos dieran las botas y los esquís, parecía interesante, pero no lo fue ya que tuvimos que esperar una o dos horas para que nos diesen a todos los materiales.

    Al salir, fuimos a que nos dieran las clases de esquí y tuvimos que ir cargando con los esquís mientras andábamos con las botas que pesaban mas de un kilo.

    Después de las clases y de la comida nos dieron tiempo  libre.Yo quería esquiar pero no encontraba mis esquís, así que jugué con la nieve. Luego, cogí unos esquís que me dio mi seño y al intentar esquiar, me caí y me doblé las piernas. No podía moverlas y me dolía mucho. La seño y mi amigo Javier me ayudaron a levantarme.

    Luego, hicimos el mismo trayecto al volver para guardar el material. 

   Al quitarme las botas y ponerme las zapatillas, sentí que me quitaban un gran peso de encima.

   Al  final, volvimos a casa después de un agotador día en Sierra Nevada. 

Alejandro Soto Castellón 

LA EXCURSION DE  ESQUI

Voy a contaros como lo pase el día de la excursión a Sierra Nevada.

Después de dormir poco por los nervios. Llegue al colegio a las 8:00 horas y a las 8:06 horas nos montamos en el autobús, para cuando llegamos a la Sierra ya eran las 9:00 horas.

 Nos pusieron unas pulseras y subimos en el telecabina. Luego, nos pusieron las botas, y nos dieron los esquís y los bastones. Pasado un rato nos dieron un chaleco para identificarnos en la pista de nieve. Subimos por una rampa eléctrica que parecía una manta. 

 

Nuestro profesor de esquí nos enseño a dar vueltas con un esquí y seguidamente con los dos esquís. Al tener esto muy bien practicado, nos dispusimos a bajar la cuesta sin bastones, que después de varios intentos me salió bien.

A las 14.00 horas nos juntamos todos los grupos para comer, nuestro bocadillo y agua. Los que quisieron se fueron a esquiar y los otros se quedaron a jugar con las bolas de nieve. 

Sobre las 15:00 horas nos reunimos para entregar el chaleco, el casco al que se lo dieron, las botas los bastones y los esquís. Al acabar bajamos otra vez por el telecabina y nos fuimos andando hasta el autobús. El retorno al colegio fue muy tranquilo ya que estábamos todos muy cansados de tanto esquiar. Sobre las 18:00 horas llegamos al colegio donde nuestras madres y padres nos estaban esperando.

 Durante el trayecto a casa le conté a mi madre todo lo que había hecho en Sierra Nevada y lo bien que me lo había pasado. Cuando llegue a casa estaba tan agotada que me duché, cené y me acosté pronto.

Al día siguiente, en el colegio la seño nos dio a cada uno un diploma.

 Yo espero que el año que viene se vuelva a organizar otro día de esquí. La experiencia para mí fue genial.

Paula Olmedo Martín